La lluvia que limpia como vendavales mi alma, negra y enmudecida, copitas pequeñas de mi corazón duro, la magia ya no se hace presente de la forma que yo quisiera...
Sin embargo acá estoy de pie, intacta, con el semblante blanco...
Estoica y quieta...de la misma forma... Impávida de sentimientos...como una muñeca al sol...alegre veraniega, feliz, mas que un estado como un sentimiento de conformidad permanente.
Un beso mis queridos compañeros, un beso a los del mas allá, un beso a los que me quieren y a los que me extrañaran, sigo viva, sigo acá...pero ya sin estar.
sábado, agosto 08, 2015
La lluvia
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